Una
perla azul entre mis manos
Me
deslumbra con su belleza
Pues
su líquida pureza
Llena
los océanos
Tan
antigua
Es
la piel azulada
Que
la tierra duerme afortunada
En
el regazo protector y universal del agua
La
capa engalanada de infinitos cristales
Digna
es de una noble reina madre
Que
lleva en el fértil vientre
Hijos
incontables
Doradas
costas
Escarchan
sus líquidos cabellos,
Filigranas
verdes absorben solares destellos
Que
inundan abismos y mares de formas imprevistas
Tú,
océano de alma pura y cristalina,
Que
custodias sacros pilares
De
ubérrimos mares
Y
semillas prístinas
¡Que
no se apague el fuego materno de tu agua!
¡Que
tu vientre no agote su fertilidad!
¡Que
tu prodiga virginidad
Sea
fuente continua
De
vitalidad!
Obra con registro de propiedad intelectual
Créditos
https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgH1qwJgIWk72qRfM7fKfc-t7x9glXCInC07DDNa5kq-znykzCwYr2ofINaDtN_losreesyVkW2jGEwTXT4MYb0XKQATrGE8Yv6Q7Zv9JqjYkER5giX9Jl60cl2Zj-CI54xhCdI7Ba0yhMI/s1600/965planeta_Azul.jpg
http://www.misionesonline.net/uploads/fotos/d40011bf370508022eeb9546ffd90a2a5a1d57b8.jpg
